Convocan a licitación para alquilar el Malecón habanero

Un nuevo llamado a emprendedores locales ha sido lanzado en la capital cubana: la Empresa de Gestión del Patrimonio S.A., vinculada a la Oficina del Historiador, abrió un proceso de licitación para ocupar temporalmente espacios del Malecón con propuestas culturales, comerciales y recreativas.  

La convocatoria tiene como meta reanimar una de las zonas más emblemáticas de La Habana mediante proyectos independientes que combinen sostenibilidad, impacto social y creatividad económica 

¿Quiénes pueden participar? 

La licitación está abierta a ciudadanos cubanos y formas de gestión no estatal, preferentemente residentes en La Habana Vieja. Aunque no se excluyen actores estatales, se espera que el protagonismo recaiga en pequeños empresarios, artistas y promotores culturales que puedan demostrar legalidad en su actividad y estar al corriente en sus obligaciones tributarias. 

El plazo para presentar las propuestas vence el próximo 30 de junio. 

¿Qué buscan las autoridades? 

Las propuestas deben fomentar el dinamismo económico de la zona sin perder de vista criterios como la inclusión social y el respeto al entorno urbano. La convocatoria alienta el uso de fuentes renovables de energía, materiales reciclables y elementos vegetales, aunque no se han especificado incentivos concretos para quienes incorporen estas prácticas. 

Espacios disponibles y condiciones 

Se han delimitado puntos específicos a lo largo del Malecón y alrededores donde se podrían establecer quioscos, instalaciones temporales o actividades culturales al aire libre. Entre ellos, destacan intersecciones frecuentadas por locales y visitantes, así como áreas contiguas a centros ya establecidos. 

El arrendamiento será de carácter temporal, con pagos mensuales y montos que comienzan en 150 pesos cubanos por metro cuadrado. Los adjudicatarios deberán cumplir con un cronograma de pagos y condiciones contractuales aún no divulgadas con plena transparencia. 

¿Cómo se elegirán las propuestas? 

Una comisión de evaluación interna será la encargada de seleccionar los proyectos más “adecuados”, según se indica en la convocatoria, bajo criterios que mezclan coherencia con el plan urbanístico, impacto económico y viabilidad técnica. Sin embargo, el nivel de independencia y pluralidad en este comité evaluador no ha sido aclarado. 

Algunas sombras en el proceso 

Aunque esta iniciativa podría significar un respiro para pequeños emprendedores que aspiran a espacios públicos de visibilidad, hay escepticismo entre expertos y ciudadanos: ¿tendrán todos los aspirantes las mismas oportunidades? ¿Qué garantía real tienen los proyectos independientes de no ser desplazados por operadores afines al aparato estatal? 

Además, la falta de claridad sobre el tiempo exacto de los permisos, las obligaciones legales y los criterios de cancelación deja interrogantes abiertos sobre la estabilidad de estos proyectos. 

Un paso necesario, aunque insuficiente 

El Malecón habanero ha sido durante décadas un símbolo de identidad, pero también un reflejo del deterioro urbano y la desatención oficial. La licitación representa un intento, tardío, de reanimarlo desde lo económico y lo social.  

Sin embargo, el verdadero impacto dependerá no solo de la creatividad de los proyectos presentados, sino de que exista una voluntad institucional auténtica de ceder espacio a la iniciativa ciudadana.