Diez pueblos en España que te pagan por mudarte

En los últimos años, varias localidades españolas han comenzado a implementar estrategias creativas para combatir la despoblación rural.  

Lejos del bullicio de las grandes ciudades, estos pueblos no solo ofrecen calidad de vida, aire puro y tranquilidad, sino también incentivos económicos reales para quienes decidan empezar de cero entre montañas, valles o tierras gallegas. 

Aquí te compartimos algunos de los lugares más interesantes que han abierto sus puertas, y sus presupuestos, a nuevos vecinos. 

Índice de contenido

• Diez pueblos en España que te pagan por mudarte (o te ofrecen casa y ayudas) 
  • Ponga (Asturias)
  • Griegos (Teruel)
  • Rubiá (Ourense, Galicia)
  • A Xesta (Pontevedra, Galicia)
  • Almadrones (Guadalajara)
  • Valle del Ambroz (Cáceres)
  • Castellolí (Barcelona)
  • Herreruela de Oropesa (Toledo)
  • Los Fayos (Zaragoza)
  • La Torre d’en Doménec (Castellón)
• Preguntas frecuentes  
  • ¿Merece la pena? 

Diez pueblos en España que te pagan por mudarte (o te ofrecen casa y ayudas) 

Con el desafío demográfico de la “España vaciada”, varias localidades han lanzado campañas para atraer habitantes. Las siguientes medidas pueden ir desde ayudas económicas directas hasta vivienda gratuita y facilidades fiscales. 

1. Ponga (Asturias)

– Incentivo: 3.000 € para parejas que se trasladen + 3.000 € extra por cada hijo nacido en el pueblo.
– Requisito: compromiso de residencia mínima, empadronamiento y vida familiar estable. 

2. Griegos (Teruel)

– Alquiler gratuito por 3 meses, seguido de 225 €/mes. Bono mensual de 50 € por cada hijo en edad escolar.
– Suma empleo garantizado y cultura local. 

3. Rubiá (Ourense, Galicia)

– Ayudas de 100 – 150 € mensuales a nuevos residentes + alquileres desde solo 50 €/mes. 

4. A Xesta (Pontevedra, Galicia)

– Alquileres muy bajos (~100 €/mes) en un pueblo pequeño de apenas 250 habitantes.

5. Almadrones (Guadalajara)

– Casa amueblada gratis + hasta 1.600 € al mes para teletrabajadores o emprendedores. 

6. Valle del Ambroz (Cáceres)

– Programa DIVA: ayudas de 8.000 – 10.000 € y bonificación extra (~5.000 €) por residencia de 2–3 años.

7. Castellolí (Barcelona)

– Casa gratuita + hasta 15.000 € para emprendedores que inicien un negocio local.

8. Herreruela de Oropesa (Toledo)

– Casas por 12.000 €, “cheque bebé” de 1.000 €, descuentos en guardería, apoyo para emprendedores.

9. Los Fayos (Zaragoza)

– Vivienda y empleo por 350 €/mes, además de mentoría y plataforma de apoyo para emprendedores rurales. 

10. La Torre d’en Doménec (Castellón)

– Casa gratis + trabajo garantizado para reactivar la zona y reabrir servicios comunitarios.

Preguntas frecuentes  

1. ¿Quién puede solicitar estas ayudas?
   Generalmente, están abiertas a españoles o residentes de la UE, pero algunos programas aceptan teletrabajadores extranjeros con visado legal en España. 
2. ¿Cuál es el requisito de permanencia mínima?
   Varía según el pueblo, usualmente entre 2 y 5 años. Cumplirlo es clave para mantener la ayuda.
3. ¿Qué pasa si me voy antes?
   Se suele exigir la devolución parcial o total del dinero. Cada municipio define sanciones específicas.
4. ¿Cómo me inscribo o empadrono?
   Los ayuntamientos publican bases y formularios: hay que rellenarlos, adjuntar documentación (DNI, contrato, plan de negocio) y formalizarlo en la web o la sede municipal.
5. ¿Tengo seguro o trabajo?
   Algunos pueblos ofrecen empleo o apoyo para emprender, suelo municipal o mentoría. En otros, corresponde buscarlo por cuenta propia.
6. ¿Hay ayudas fiscales adicionales?
   Sí. Comunidades como Andalucía, Asturias, Valencia o Castilla-La Mancha aplican deducciones en IRPF, ITP y AJD por comprar o rehabilitar vivienda en municipios rurales. (idealista.com, cadenaser.com)
7. ¿Y la conectividad e infraestructura?
   Muchos programas incluyen fibra óptica, transporte básico y mejora de servicios, aunque aún puede haber zonas con cobertura limitada.

¿Merece la pena? 

Abandonar la ciudad no es solo un cambio de domicilio: implica adaptarse a la vida comunitaria, servicios más básicos y ritmo rural. Sin embargo, con una planificación adecuada y un proyecto claro (teletrabajo, inversión, familia), estos pueblos ofrecen una oportunidad real para una vida más tranquila, tierras a valor bajo y un entorno natural enriquecedor.