Así esta cubana manda paquete a Cuba y despierta ternura

En un video viral, una cubana manda paquete a Cuba mostrando con dedicación cada paso de su proceso: desde la elección del suéter perfumado hasta la delicada colocación de esponjas de fregar.

Lo que para muchos sería una tarea rutinaria, para ella se convierte en un acto cargado de nostalgia, orgullo y esperanza.

Usuarios como Marinita Pérez relataban cómo, tras enfermarse de cáncer, dejaron de llamarla cuando más necesitaba apoyo, y conmovía leer su testimonio: «Ojalá no te pase lo que a mí… cuando me enfermé y cogí cáncer, mi familia se alejó y ni me llamaron» (Marinita Pérez).

Otros, como Tati Reyes López, confesaban cuánto deseaban replicar ese gesto: «Mi mamá me pidió que le mandara alguna prenda con el olor de nosotros; tengo dos hijos aquí y ahora también un nieto que aún no conoce» (Tati Reyes Lpz).

La fuerza de un gesto sencillo

Mientras perfuma el suéter de su madre, Yame expresa: «Quería compartir con ustedes ese momento en que encontré cosas para enviarle a mi familia. No sé si para ustedes esto es algo que les dé tanta satisfacción como a mí, porque a mí me da melancolía, me da felicidad», y justo ahí radica el corazón de cualquier cubana manda paquete a Cuba: en el abrazo invisibilizado por el aroma que se impregna en la tela. Ese olor viajará con el paquete y al llegar será un puente de memoria y cariño.

@yame2331 Para mi familia hermosa❤️🥺Gracias Dios mío por no dejarme sola❤️❤️#familia#Cubaduele#hermanos#madres#hijos#abuelos ♬ sonido original – Soy Pentecostal

Voces que laten al unísono

El video no solo movió a la protagonista; generó un coro de empatía en más de 262 comentarios. Maritzaborras comentaba «Bendiciones niñita, agradezco ver estos videos y pido que muchos los vean» mientras yaima celebraba esa alegría compartida: «Esa soy yo: me da una alegría verles las caras cuando reciben las cosas» (yaima.

Milenis Castillo confesaba que el gesto le sacó las lágrimas y le recordaba su propia experiencia: «Bendiciones Mimi, me sacaste las lágrimas… yo soy así mismo» (Milenis Castillo).

Incluso quienes no pueden enviar paquetes por falta de empleo, como Emily Morales, hallaron consuelo: «Eso es lo único que nos hace felices cuando le hacemos un paquete, nos llena de fuerzas y alegría» (emily_morales00).

Detalles prácticos para enviar tu paquete

Aunque el componente emocional sea esencial, una cubana manda paquete a Cuba con eficacia cuando cumple estos pasos: declara el contenido y valor en el formulario D-6, adjunta copia de su identificación, respeta el límite de 30 kg y suma de dimensiones de 1,5 m, y elige entre empresas como Cubapack, JetCargo o Tropical Shipping.

Los costos oscilan entre 80 USD y 150 USD por envío aéreo (2–3 semanas de tránsito) y desde 60 USD por vía marítima (4–6 semanas).

Consejos para un paquete lleno de amor

• Clasifica: ropa en bolsas selladas, líquidos aparte.
• Protege: usa plástico de burbujas o papel kraft para objetos frágiles.
• Etiqueta: nombre, dirección y contenido declarado.
• Carta personal: unas líneas manuscritas expresarán tu cariño de forma única.
• Cierre con cariño: añade un lazo o sticker personalizado.

Con estos pasos, tu envío llegará no solo intacto, sino cargado de calidez.

El orgullo que no conoce distancias

Cuando Yame confiesa «Oh, señores, estoy tan, pero tan orgullosa de mí misma… para mí, eso es mi mayor orgullo, pero más, mucho más grande», resuena la voz de quienes saben que enviar un paquete es el modo más auténtico de decir «te extraño» y «te amo» al mismo tiempo.

Como dijo un seguidor: «Así esta cubana manda paquete a Cuba y despierta un mar de ternura», y muchas otras voces rindieron homenaje al sacrificio diario: «Es una tristeza y una alegría a la vez» (Maidel Rosabal) o «Cuando tenemos buenos sentimientos sentimos eso que sientes; si te ocupas de tus hijos y tu madre jamás pienses que hiciste mal» (lizyhernandez).

Conclusión

Más allá de trámites, límites de peso y costos, cada cubana manda paquete a Cuba demuestra que el verdadero valor reside en cada suspiro, cada lágrima y cada palabra susurrada al acomodar un pequeño detalle.

Si planeas tu próximo envío, recuerda que, como muchos han dicho, «eso es lo único que nos hace felices» y que cada aroma, cada prenda y cada nota personal será el abrazo que tu familia necesita al otro lado del mar.