Aventuras cubanas: lista con las 10 más memorables de todos los tiempos 

Los jóvenes y los no tan jóvenes de estos tiempos crecimos con un popular espacio televisivo que marcó nuestra infancia: las aventuras cubanas. A las 7:30 de cada noche de lunes a viernes ahí estábamos como los primeros para disfrutar de estos programas tan gustados de la televisión cubana, que por aquellos tiempos estaban en su momento de gloria.

¿Qué ha pasado con las aventuras cubanas? Desgraciadamente, cada nueva propuesta de los últimos tiempos no eran más que un bodrio mediocre hasta que cayeron en desgraciada. Algunas de las producciones de aquellos tiempos como El medallón, El guardián de la piedra o Los tres Villalobos hicieron mella del género y ¿el resultado?: que las aventuras fueron desapareciendo de la parrilla televisiva.

Se tiene noticias de algunos seriados recientes, por ejemplo, Mucho ruido, Adrenalina 360 o Calendario (que está saliendo al aire en estos momentos), pero ¿lograrán entrar en el selecto club de aventuras inolvidables?… solo el tiempo lo dirá.

Condenadas a ser recordadas con nostalgia, en este artículo desempolvamos esas aventuras de factura nacional que han dejado huella y marcado a generaciones de cubanos.

Lista de aventuras cubanas

1. Los vikingos (1967)

En 1963 se creó el espacio Aventuras en la TV cubana. Desde ese entonces la programación se convirtió en sagrada para los niños, jóvenes, madres, padres, abuelos y abuelas. Por lo general, durante estos primeros años las propuestas eran adaptaciones de grandes obras literarias. Así, entre los hitos de esta época se recuerdan Robin Hood (1964) o El Zorro (1965).  

Más tarde Los vikingos fue otra de las aventuras cubanas de los 60 capaz de dejar vacías las calles de niños y adultos que se pegaban al televisor (los que tenían TV y los que no, corrían a las casas de sus vecinos). Alejandro Lugo con esta serie alcanzó la más alta cota de popularidad entre la teleaudiencia cubana.

2. El capitán tormenta (1974)

Entre las mejores aventuras cubanas de los años 70 sería imperdonable no mencionar El capitán tormenta. Basada en la novela del escritor Emilio Salgari, bajo la dirección de Erich Kaupp, con un extraordinario elenco entre los que destaca Cristina Obín en el rol protagónico de heroína, logró convertirse en una de las propuestas más populares hasta el sol de hoy.

Esta aventura se transmitió en vivo, por eso son escasos los materiales que se han podido conservar. Aun así, habita en la memoria de todos los cubanos que la disfrutaron por aquella época.   

 3. El Halcón (1980)

Abriendo la década de los 80, aparece otra de las grandes aventuras cubanas: El Halcón. Fue dirigida por Armando Cabezas y el guion se basó en el libro homónimo del escritor turco Yasar Kemal.

Un reconocido Jorge Villazón ocupó el rol protagónico en el personaje de Memed. Su compañera de reparto, una jovencísima Irela Bravo, también ganó popularidad. Todo cubano que haya disfrutado esta aventura seguramente recuerda la mítica frase: «Abdi Aga no eres dueño de Cinco Aldeas, las tierras son de los campesinos»

4. Hermanos (1989)

La aventura cubana Hermanos se encuentra en el top de espacios televisivos más gustados. La historia, que integra acción, drama y romance, relata los caminos distintos de los hermanos Iznaga, de inclinaciones y temperamentos muy distintos, luego de que Don Esteban (Rogelio Blain), un rico hacendado que pretendía apropiarse de todas las tierras aledañas a su propiedad, asesinara al padre de los hermanos.

El grito «Lorencito» se impregnó tanto en la cultura popular cubana que muchos hoy recuerdan esta aventura por ese nombre. Además de este legendario recuerdo, la aventura logró ser memorable no solo por la excelente dirección de Eduardo Macías, sino también por las actuaciones, en especial, de los hermanos Lorencito (Reynaldo “Rini” Cruz), Tomás (Rolando Brito Rodriguez) y su padre (Héctor Echemendía).    

5. Los pequeños campeones (1989)

Mejor conocida como Los campeones, fue otra popular serie cubana de los años 80. ¿Recuerdan las peripecias de Yosvani, Bienvenido y Biyaya? Son los verdaderos héroes de esta historia que tiene a la preciada pelota cubana como eje central de la trama.    

6. Los papaloteros (1991)

Una de las aventuras cubanas de los 90 de culto es, sin duda, Los papaloteros. Ambientada en la realidad cubana de finales de los años 50, se convirtió en un fenómeno de audiencia gracias a su conmovedora historia.

Juani (Ariel Fundora), un niño de Santiago de Cuba que se va a La Habana para trabajar y ayudar a su familia, junto a sus amigos Pedrito (Xavier Mili) y Cutú (Etiane Alfonso) retratan con magistral talento las peripecias propias de los niños de su edad, al mismo tiempo que rescatan los juegos tradicionales cubanos, como el papalote, las carriolas o la pelota, en una muestra de pureza inmensa.  

7. Shiralad: el regreso de los dioses (1993)

Shiralad es una aventura cubana sui generis que ha sido amada por muchos y odiada por otros. Fantasía heroica y ciencia ficción a la que no estábamos acostumbrados aparecía por primera vez como género en el espacio Aventuras, lo que hizo que fuera la gran incomprendida.   

No obstante, en cuanto a valores artísticos logró entrar por la puerta grande a pesar del complejo contexto nacional en que se rodó (pleno periodo especial). Ha sido salvada y recordada, entre otras cosas, por un buen guion y excelente elenco: Pedro Rentería, Jorge Perugorría, Héctor Noas, Jorge Cao, Mabel Roch, Mirtha Ibarra y muchos otros.

8. Blanco y Negro, no (1994)

Y una aventura cubana que marcó a la generación de los 90 fue Blanco y Negro, no. La propuesta logra mostrar muchos de los problemas de los adolescentes de la contemporaneidad, sus miedos, frustraciones, sueños…, fórmula que está en la base del éxito rotundo de esta aventura. Con ella los jóvenes de su época rieron, lloraron y se sintieron identificados.

Tuvo como protagonista a la gran y querida actriz cubana Laura de la Uz y contó, además, con un elenco compuesto por Roberto González, Coralia Veloz, Alden Knight, Ángel Toraño, entre otros.

9. Enigma de un verano/Coco Verde

Los primeros años de la década del 2000 la televisión trajo dos grandes aventuras cubanas, bajo la dirección de Roly Peña: Enigma de un verano (2001) y Coco Verde (2003). Una continuación de la otra, narran historias de amor y amistad con dosis exactas de diversión, intriga e historia.

El éxito de esta serie radica, entre otras cosas, en tener un elenco de jóvenes promesas de la TV, en utilizar un lenguaje muy juvenil y por tratar temas de la contemporaneidad acorde con el público de la aventura.

10. Los pequeños fugitivos (2001)

Felito, Tony, Quiroga, Malvino Fortuna, Bandurria (o Mandurria como muchos niños le decían)… ¿quién no recuerda las aventuras cubanas de estos niños que recorren toda Cuba perseguidos por los villanos Quiroga y Bandurria? ¿O esa clásica frase: «Aunque tenga que perseguirlos hasta el mismísimo infierno, estos chiquitos van a saber quién es Ernesto Quiroga»?

Estaba ambientada en los años 50 y, una vez más, se destaca el papel de la amistad por encima de las clases sociales. Los pequeños fugitivos es una propuesta que gustó muchísimo al público infantil y juvenil. Tuvo una primera versión, en 1986, con Alexis Valdés como Bandurria y Manolo Melián como Quiroga.

Palabras finales

¡Qué recuerdo las aventuras cubanas! Nos despedimos por ahora con la grata evocación de esos programas que eran los únicos capaces de sacarnos de las calles por media hora. Estamos seguros de que nos quedan muchísimas aventuras cubanas por mencionar… ¿cuáles han sido tus favoritas? , ¿agregarías algunas más a este listado?